Villalmendruco de Todo lo Alto es un pequeño pueblecillo en el que viven una serie de niños acompañados por sus abuelos y son estos niños y no sus abuelos los que se dedican a mantener a estos.
En clase hacen todo tipo de trabajos: cogen leña, ordeñan, labran, hacen jaulas para los conejos, suben al castillo donde su profesor, Don Nicomedes les cuenta las historias y batallas del lugar.
Todo ello en contraposición del mal comportamiento de los abuelos que eran unos pasotas, y no querían más que tomar el sol, hacer el vago y vivir la vida. Un día llegó una inspectora del Ministerio, porque la escuela necesitaba ayuda en las reformas, en la estufa y en los autobuses que pedían los niños para las excursiones.
Días después el profesor recibió una notificación para crear una Escuela del Año 2000, la enseñanza se encargaría un robot.
Tiempo más tarde, todos los habitantes estaban controlados por el robot a través de unos objetos que se llamaban prismas.
Todos menos el profesor, Jacobo y el tío Cosme. Estas tres personas serían los encargados de descubrir el misterio, a través de una conversación entre los robots y a raíz de esto, quitan los primas de todos los habitantes del pueblo mientras que dormían y consiguen librarles del hechizo. y esto es lo que hacen que al poner el cuadro encima del baúl de los prismas, el control que ejercían estos sobre los habitantes se desmorone.
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